jueves, 2 de junio de 2016

Un cabeza dura

Boxeo internacional-En un final controversial, el alberdiano Marcos Villafañe derrotó en un fallo por puntos a David Rivero, púgil boliviano, en el combate de peso pluma disputado el ùltimo viernes en la localidad de Villa Belgrano.

El combate entre profesionales finalizó con David Rivero en mal estado.



La jornada del Sur tucumano fue testigo de una gran velada boxística, la cual daría su último espectáculo con la pelea estelar a tres rounds entre el local Marcos Villafañe y David Rivero, oriundo de Bolivia, como únicos profesionales participantes. Previo a ésta, cuatro enfrentamientos amateurs tuvieron lugar, todos entre boxeadores de nuestra provincia.

La hora señalada llegó, y Villafañe y Rivero saltaron al ring, matando las expectativas de los asistentes (que por condiciones climáticas, no resultó el número esperado por los organizadores). La óptima condición física de ambos les permitió reconocerse y tantearse mutuamente, siendo el alberdiano el primero en dar el paso ofensivo, aunque sus golpes no prosperaron en la humanidad de su oponente.

El round siguiente tuvo un inicio similar, y hasta un nivel más de estudio entre los peleadores, pero fue el boliviano quien impactó en el rostro del local, acción que fue suficiente para reacción de Villafañe, para responder con varios golpes, arrinconando a Rivero, que trababa los movimientos del atacante por medio de abrazos. El final del segundo segmento, con embestidas de Villafañe frustradas por Rivero.

Sabiéndose inferior en las tarjetas parciales, el boliviano intentó ser quien lleve el mando de las acciones al atacar al argentino, aunque este último bloqueó exitosamente la ofensiva contraria, para luego contragolpear y así llevarse la pelea a su favor.

Una acción confusa, llegando al cierre, derivó en un golpe involuntario de Villafañe con su cabeza sobre la frente de su oponente, donde Mario Ibarra, juez de Concepción (de la Federación Argentina de Boxeo), detuvo las acciones para que el herido reciba atención médica, al encontrarse mareado. Como consecuencia, a Villafañe le descontaron un punto y se dio por finalizado el combate ante el evidente malestar del proveniente de Bermejo, Bolivia.

A pesar del perjuicio en las tarjetas, la victoria de Marcos Villafañe no corrió peligro, y su segunda pelea profesional también resultó exitosa, haciéndolo de manera unánime, en una sólida actuación, para alegría de su gente, que a pesar del resultado, esperaba una velada más entretenida.

Dicha exigencia del público se dio debido a cuatro peleas amateurs que valieron la pena seguir, a pesar de un frío que castigaba: victorias de Augusto Torres (61 kg.) y Ángel Arsenio (61 kg.), ambos por puntos sobre Sebastián Jimenez (57 kg.) y Lucas Gonzalez (64 kg.), respectivamente. Un apasionante empate entre Augusto Ybarra (80 kg.) y Francisco Herrera (82 kg.), y un contundente KO Técnico de Roque Juarez (61 kg.) sobre Marcelo Floreal (66 kg), completaron una estupenda previa.

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